Una ensalada de éste tipo, o al menos muy similar, se servía en los Ten Cent* de La Habana. Recuerdo que la servían con una boleadora de helados en un plato con algo de verduras y unas tostadas. Era toda una delicia para ese calor intenso que suele tener La Habana. Los Ten Cent de La Habana fueron para mi el primer encuentro de lo que en los tiempos modernos se denomina cocina abierta. Era todo un lujo ver trabajar a aquellas mujeres – pues fue básicamente el sexo femenino que dominaba sus cocinas – con esos aparatos de color metálico y esas butacas rotatorias que se podían subir a la altura necesaria. Era gracioso hacer la cola detrás de otro cliente y tratar de coincidir con mis hermanos y mi mamá para poder comer juntos.
2 pechugas de pollo
4 dientes de ajo
2 hojas de laurel
unos granos de pimienta negra
1 cebolla (de porte mediano)
1 cucharada de puré de tomate
1 ml de vino de Oporto
4 hojas de lechuga
sal
mayonesa – preferiblemente casera**
verduras a gusto
tostadas
Cocer las pechugas con los dientes de ajo, los granos de pimienta y las hojas de laurel. Retirar y esperar que tome temperatura ambiente. Desmenusar con las manos, tipo hilachas.
Pelar y cortar la cebolla tipo brunoise, o sea en dados bien pequeños. Lavar las hojas de lechuga y cortarlas tipo juliana, bien finas.
En un recipiente colocar el pollo deshilachado junto a la mayonesa, el puré de tomate, el vino, la cebolla y la lechuga. Remover bien y poner sal a gusto.
*Ten Cent: Una cadena de tiendas en La Habana entre las decadas de los 50 y 60.
** La receta se encuentra en el apartado «Salsas y mojos«
Mi hermano, ya estoy en el aire nuevamente en el Internert así que a cada rato entrare a tu blog. ya no sé si entro para hacerme la boca agua con las recetas o para vivir de nuevo nuestra niñez y juventud con tus anécdotas como esta de la cola detrás del que estaba comiendo en el Ten Cent…., entonces y aunque no sale en esta receta; que cosa es una gallina libre?, acaso es una que se fue de Cuba?, aclárame eso please.
Es un placer que entres en este sitio, te leas la receta de pe a pa y encima comentes. Tú formas parte de ese grupo generacional que tan buenos recuerdos me trae la banda de 24. Más escribiré sobre nosotros y nuestras comidas nocturnas luego de las fiestas o las tertulias de las esquinas. Una gallina libre es una gallina en libertad, no necesariamente del combinado del este, pero si muy cerca de la libertad con pasaporte o al menos para poner sus huevos donde le venga en gana, no estacionaria en una granja. El huevo es mucho más saludable por muchas razones.
Tengo que probar esta ensalada con el toque de oporto, algo nuevo para mi.
Recuerdo que por muchos nombres que le pusieron a estas tiendas con «el desastre» la gente les seguía llamando igual.
Gracias por tu lindo comentario en el blog el otro día. No había podido pasar por acá antes.
Un abrazo,
Vero
Gracias a ti por la visita y el comentario.
Los Ten Cent eran una cadena americana de ventas al menudeo desde 5 y 10 centavos , Woolworth era el nombre real, luego del 59 se llamaron tiendas «Variedades» y tomaban el nombre del lugar donde se encontraban, variedades galileo, variedades vedado etc, pero perdieron todo el «glamour» después de esa época, muchas personas que conocí vivían del almuerzo en esos lugares….
Correcto Ren, gracias por leerme y comentar.
Gracias a ti, buscaba una receta para ensalada de pollo y encontré tu blog, ya he copiado varias, gracias, mantendré el contacto, por cierto, me quede con ganas de croquetas de jamón….
Las croquetas de jamon saldran, como las de carne y otras variantes , como de setas o espinacas, de camarones y algo más, creo que ya publique las de Bacalao y Pollo, en casa a mis hijas les hago de pescado y en cada croqueta pongo un camaron, es como el juego de los huevos kinder y a las nenas les encantan.
Gracias por la receta y el comentario me has hecho alegrar. Alguien dijo «ricordar es voler a vivir «. Saludos
Gracias Magaly, es que Cuba siempre va conmigo , gracias por tu comentario y disculpas por la demora he tenido muchísimo trabajo.
Este sitio que recién he encontrado me encanta, ahora recuerdo esos buenos momentos vividos como éstos del Ten Cent, añado que las empleadas llevaban en el bolsillo un pañuelo que les daba un toque elegante, además por ver nuestras recetas de toda la vida enriquecidas en los tiempos actuales y que nos levanta el orgullo una vez más que nuestra cocina también merece un reconocimiento, gracias por tu trabajo
Gracias a ti Beatriz por entrar y dejar unas palabras tan lindas.
Beatriz : Gracias a ti por entrar y dejar un comentario tan lindo.